Y además... ¿quiénes somos nosotros para juzgar quién merece y quién no? Retener es una estupidez. En el último viaje no nos llevaremos nada... que valga en el lugar a donde vamos.
Hola ñOCO Le bOLO. Gracias por venir. Buena pregunta, yo también la dejo en el aire. Estoy de acuerdo contigo en lo que dices. Además retener también es de egoístas. En el último viaje de nada sirven, cierto. Un abrazo fuerte!!!! Beso.
Grande Gibran, y es verdad lo que dice ñLB, ¿quiénes somos para juzgar? Pero quién planta los árboles, quién los riega, porque sus frutos responden a un esfuerzo y está bien dar cuando hay en abundancia, pero cuando los bienes escasean es inevitable elegir.
La utopía del gratis total y para todos termina con un árbol seco y sin frutos frente al que se alinean todos con la mano extendida. Hace falta un equilibrio.
Grande Gibran, y es verdad lo que dice ñLB, ¿quiénes somos para juzgar? Pero quién planta los árboles, quién los riega, porque sus frutos responden a un esfuerzo y está bien dar cuando hay en abundancia, pero cuando los bienes escasean es inevitable elegir.
La utopía del gratis total y para todos termina con un árbol seco y sin frutos frente al que se alinean todos con la mano extendida. Hace falta un equilibrio.
Interesante tu punto de vista, Tawaki. Yo pienso que Gibran hablaba de un mundo de igualdades, donde todos los componente permanecían invariables y lo único que cambiaba era el elegir en el dar, y con ello el retener y perecer. Pero sin duda tu sentido racional de las cosas no tiene argumentos en contra, te doy la razón yo también. Porque viendo una parte del proceso, has entendido la otra que se obviaba. Has venido a poner equilibrio a Gibran, y a mi :-) ¡¡Gracias!! Un beso.
Un año más de vida. Un escalón más que subo y, ¡caramba! las vistas siguen siendo igual de bonitas. Porque la belleza, la bondad y las cosas que merecen la pena, muchas veces están en el ojo del que las mira. Como en el ojo de mi amiga Laura , autora de esta foto que acompaña hoy mi entrada. ¡Gracias! Aprendo mucho de tu manera de ver la vida y disfrutar el día a día. Feliz y agradecida por seguir adelante, por tener salud y porque mi familia y personas que quiero también la tengan. Feliz y agradecida por los amigos que siempre están, en las buenas y no tan buenas, que se alegran con mi alegría.....y que con cariño en fechas importantes y señaladas quieren hacerse más presentes aún si cabe. Un abrazo enorme a todos ustedes que se acercan a mi blog, les tengo un cariño inmenso, pero eso……....eso ya ustedes lo saben :-) Mil gracias!!! Que sigamos compartiendo y disfrutando muchos años más: Leyendo, viajando, aprendiendo, rememorando la historia y sus personajes, disfrutando de la
He terminado de leerme el libro "El secreto de Ágatha", de Marie Benedict. Me ha gustado muchísimo, es una novela que me ha tenido enganchadísima. Y quiero destacar algo más, hizo una función muy importante: me sacó de mi mundo por completo, para meterme en el suyo. Su capacidad para abstraer al lector (al menos hablo por mi) es bestial. Y todo sea dicho de paso, me vino muy bien porque mi mente estaba llena de ruidos de cosas que no dependían de mí. Fue justo lo que necesitaba en el momento preciso. Particularmente siempre me ha gustado Ágatha Christie. De la época inmediata siguiente a mi niñez, recuerdo que me encantaba leer sus libros. ¡¡Los tenía todos!! Este libro que traigo hoy, no está escrito por ella, pero sí es una novela inspirada y argumentada en su vida, en especial el suceso de su misteriosa desaparición, de la que -supongo- muchos habrán oído hablar. Este libro es ficción basado en un hecho real, por lo que la versión que aquí se da es mera hipótesis. La n
He terminado de leerme "Incertidumbre" de Miguel Alcantud. Me ha dejado un desconcertante sabor de boca, y me da lástima porque el libro es un regalo que me han hecho, con el valor añadido que yo le doy por eso. La historia me parece interesante, leyendo la sinopsis pensé que iba a encontrarme con una lectura atrayente y vibrante. Sin embargo no fue así, pienso que los hechos no son nada creíbles, y que los argumentos que utiliza hacen aguas por todos lados. Es un libro que se lee rápido, los diálogos son sencillos pero no logré empatizar con los protagonistas. La novela no me enganchó, no me aportó nada nuevo, no me hizo sentir nada especial al leerlo, ha sido una lectura muy plana además de incoherente. Miguel Alcantud, nació en Cartagena (1971). Es Director de las series más populares de España en los últimos tiempos, Guionista y autor de más de veinte Producciones Teatrales. Sinopsis: ¿Crees en las señales?. La vida de Susana cambiará para siempre cuando reciba un re
Y además... ¿quiénes somos nosotros para juzgar quién merece y quién no?
Retener es una estupidez. En el último viaje no nos llevaremos nada... que valga en el lugar a donde vamos.
Un abrazo
· LMA · & · CR ·
Hola ñOCO Le bOLO.
EliminarGracias por venir.
Buena pregunta, yo también la dejo en el aire.
Estoy de acuerdo contigo en lo que dices. Además retener también es de egoístas.
En el último viaje de nada sirven, cierto.
Un abrazo fuerte!!!! Beso.
Grande Gibran, y es verdad lo que dice ñLB, ¿quiénes somos para juzgar? Pero quién planta los árboles, quién los riega, porque sus frutos responden a un esfuerzo y está bien dar cuando hay en abundancia, pero cuando los bienes escasean es inevitable elegir.
ResponderEliminarLa utopía del gratis total y para todos termina con un árbol seco y sin frutos frente al que se alinean todos con la mano extendida. Hace falta un equilibrio.
Grande Gibran, y es verdad lo que dice ñLB, ¿quiénes somos para juzgar? Pero quién planta los árboles, quién los riega, porque sus frutos responden a un esfuerzo y está bien dar cuando hay en abundancia, pero cuando los bienes escasean es inevitable elegir.
ResponderEliminarLa utopía del gratis total y para todos termina con un árbol seco y sin frutos frente al que se alinean todos con la mano extendida. Hace falta un equilibrio.
Interesante tu punto de vista, Tawaki.
EliminarYo pienso que Gibran hablaba de un mundo de igualdades, donde todos los componente permanecían invariables y lo único que cambiaba era el elegir en el dar, y con ello el retener y perecer.
Pero sin duda tu sentido racional de las cosas no tiene argumentos en contra, te doy la razón yo también.
Porque viendo una parte del proceso, has entendido la otra que se obviaba.
Has venido a poner equilibrio a Gibran, y a mi :-)
¡¡Gracias!!
Un beso.