Es cierto, es una expresión que había oído en varias ocasiones. Por cierto es una de las muchas frases que dijo Maya Angelou, escritora, cantante y activista por los derechos civiles estadounidense, a lo largo de sus 86 años de vida. Saludos
Hola Jubi. Y yo creo, que no es la primera vez que la empleo en este blog. Gracias por apuntar a la autora! Me alegro que coincidas con el mensaje. Un besote!
Me gusta la reflexión, sin embargo, considero que las palabras y los hechos de quienes significaron mucho en la vida de otras personas, no sólo se recuerdan sino que se transmiten.
Hola Una mirada..... Pues tienes mucha razón. Las palabras y los hechos de quienes tan bien nos han querido (y viceversa) no se olvidan, incluso tendemos (queremos) transmitirlo. Son nuestros luceros!! Y magníficos ejemplos!!
Pero la frase.....en muchos momentos.......con muchas personas que dicen tenerte cariño y que les importas, y sin embargo en un momento determinado ¡zas! tienen una reacción (palabra, expresión, hosquedad....) cuando menos lo esperabas, que te descuadra y hasta te duele.
El cómo alguien te hace sentir, es la verdad impepinable, sin trampa ni cartón. El resto es humo!
Completamente de acuerdo, porque los sentimientos nos remiten a lo más primario de nuestro ser, y es lógico que primen sobre una palabra que llegó después.
Acierta además, porque no importa cuán bueno sea nuestro gesto si a la otra persona no le llega, o le afecta de una manera que no esperábamos.
Hola, Tawaki. Con tu primer párrafo estoy muy de acuerdo, lo suscribo. Es la esencia de la cita que elegí.
En el segundo párrafo, solo con matices. Considero que hay ocasiones (no siempre, claro) en que no hay margen al "no llegó como quise" , "le afectó de una manera que no esperaba". En esos casos, un adulto es consciente antes de conocer la interpretación del otro, de la intención (fuera de lugar, o no) con que ha hecho-dicho algo. Lo que se traduce directamente en cómo lo hizo sentir.
·. La afirmación es incuestionable. Nos debiera llevar a la reflexión sobre lo que queremos dejar de herencia. Ni las palabras, ni los hechos, servirán para nada si no has dejado plantada una semilla, los sentimientos que hayas despertado. Un beso .· LMA · & · CR
Hola Alfonso. Qué bonito lo que dices. Y cuán de acuerdo estoy contigo!! Esa semilla, como apuntas, es la que nos hace sentir las cosas (para bien o para mal). Puedo olvidar lo que me dijiste, puedo olvidar cómo sucedieron las cosas al detalle. Pero jamás olvidaré cómo me hiciste sentir. Para bien. Y para mal. Por supuesto, nos debería llevar a la reflexión sobre qué semilla queremos sembrar en los demás. Es lo que quedará para siempre. Muchísimas gracias por venir y comentar. Un beso!
Acabo de terminar de leerme la novela "El viaje de las palabras", de Clara Usón. Cuando iba a tirar mano de mis lecturas pendientes, mi amigo Una Mirada me nombró este libro. Lo puso en mi camino, y yo que soy una fiel admiradora de Antón Chéjov, no pude posponer su lectura. Me gustó mucho. Es una novela fresca, entretenida, curiosa, inteligente, original, diferente y sorprendente, pero sobre todo es un fantástico resumen de las mejores obras de Chéjov. Está escrita con humor e ironía, a modo de anécdotas y vivencias, lo que hace su lectura muy amena. Consigue transportarnos en el tiempo y el espacio, situándonos - al igual que hace nuestra protagonista- en la Rusia del siglo XIX, más concretamente en la finca donde vive Antón Chéjov. La autora ha hecho un gran trabajo de investigación, y eso se nota muchísimo, también se palpa esa admiración que siente por el escritor ruso (la cual comparto). Destaco su peculiar forma de contar las cosas, de mezclar los datos objetivos c
He terminado de leerme el libro "Nuestra Casa", de Louise Candlish. Me ha gustado mucho y me ha tenido imantada a sus páginas con un interés mayúsculo. Es uno de esos libros que te atrapan y no puedes parar de leer. En verdad consigue captar todos tus sentidos. Nada más comenzar, en la primera página se describe cómo nuestra protagonista se acerca hasta su domicilio y se encuentra un camión de mudanzas delante de su casa. No había pasado ni 1/6 parte del libro y habían pasado tantas cosas, que pensé cómo iba la autora a completar la historia. ¡¡Pero vaya si lo hace, y cómo lo consigue!! Aunque muchas veces mi mente jugó a pensar un paso más allá, imaginando cosas que más adelante resultaron ser ciertas, el libro me sorprendió mucho. No es el típico thriller estándar, no es un tema plano sino que está llena de giros inesperados. No sucede todo de la manera convencional, las subtramas se encuentran muy bien hilvanadas a la base principal y se mueven a gran velocidad. Te llev
He terminado de leerme el libro “Miss Marte” de Manuel Jabois. Fueron varias las ocasiones en que lo había visto en las librerías y siempre lo había relegado frente a otros libros. Ahora me decidí a leerlo y lo hice con la mejor de las disposiciones, pero siento decir que no me gustó. Creo que la idea tiene posibilidades, pero la manera en que el autor la ha llevado a cabo me ha parecido un caos enorme. No me enganchó, me resultó superficial e incluso, por momentos, aburrida. Pero la manera en que está escrito ha sido una decepción, el final me pareció precipitado, se saca de la manga justificaciones que nadie (lector) había visto en las páginas anteriores del libro. Y por más ganas que le puse llegué al final más por empeño que por placer o gusto. Una lástima, ha sido mi primera incursión en las letras de Manuel Jabois, y -de momento- no me he quedado con ganas de más. Jabois nació en Pontevedra (1978), es periodista y escritor. Aunque inició varias Carreras de Letras, no terminó ni
Es cierto, es una expresión que había oído en varias ocasiones.
ResponderEliminarPor cierto es una de las muchas frases que dijo Maya Angelou, escritora, cantante y activista por los derechos civiles estadounidense, a lo largo de sus 86 años de vida.
Saludos
Hola Jubi.
EliminarY yo creo, que no es la primera vez que la empleo en este blog.
Gracias por apuntar a la autora!
Me alegro que coincidas con el mensaje.
Un besote!
Me gusta la reflexión, sin embargo, considero que las palabras y los hechos de quienes significaron mucho en la vida de otras personas, no sólo se recuerdan sino que se transmiten.
ResponderEliminarAbrazos.
Hola Una mirada.....
EliminarPues tienes mucha razón. Las palabras y los hechos de quienes tan bien nos han querido (y viceversa) no se olvidan, incluso tendemos (queremos) transmitirlo. Son nuestros luceros!! Y magníficos ejemplos!!
Pero la frase.....en muchos momentos.......con muchas personas que dicen tenerte cariño y que les importas, y sin embargo en un momento determinado ¡zas! tienen una reacción (palabra, expresión, hosquedad....) cuando menos lo esperabas, que te descuadra y hasta te duele.
El cómo alguien te hace sentir, es la verdad impepinable, sin trampa ni cartón. El resto es humo!
Muchas gracias por tu comentario.
Abrazote!
Completamente de acuerdo, porque los sentimientos nos remiten a lo más primario de nuestro ser, y es lógico que primen sobre una palabra que llegó después.
ResponderEliminarAcierta además, porque no importa cuán bueno sea nuestro gesto si a la otra persona no le llega, o le afecta de una manera que no esperábamos.
Hola, Tawaki.
EliminarCon tu primer párrafo estoy muy de acuerdo, lo suscribo. Es la esencia de la cita que elegí.
En el segundo párrafo, solo con matices.
Considero que hay ocasiones (no siempre, claro) en que no hay margen al "no llegó como quise" , "le afectó de una manera que no esperaba". En esos casos, un adulto es consciente antes de conocer la interpretación del otro, de la intención (fuera de lugar, o no) con que ha hecho-dicho algo. Lo que se traduce directamente en cómo lo hizo sentir.
Gracias por tu comentario y aportación.
Un beso.
·.
La afirmación es incuestionable. Nos debiera llevar a la reflexión sobre lo que queremos dejar de herencia.
Ni las palabras, ni los hechos, servirán para nada si no has dejado plantada una semilla, los sentimientos que hayas despertado.
Un beso
.·
LMA · & · CR
Hola Alfonso.
EliminarQué bonito lo que dices. Y cuán de acuerdo estoy contigo!!
Esa semilla, como apuntas, es la que nos hace sentir las cosas (para bien o para mal).
Puedo olvidar lo que me dijiste, puedo olvidar cómo sucedieron las cosas al detalle. Pero jamás olvidaré cómo me hiciste sentir.
Para bien.
Y para mal.
Por supuesto, nos debería llevar a la reflexión sobre qué semilla queremos sembrar en los demás. Es lo que quedará para siempre.
Muchísimas gracias por venir y comentar.
Un beso!