Los indianos
Un año más, la fiesta de Los Indianos, vuelve a ser el plato fuerte del carnaval de la isla de La Palma. Y un año más me reafirmo en que no me gustan los carnavales, salvo Los Indianos en La Palma. Y es que aquello es otro mundo festivo, más alegre, menos chabacano, más distendido, y muuucho más bonito y divertido. Bajo mi punto de vista, claro. Cuestión de gustos... Es todo un reclamo para las miles de personas que viajan desde todos los puntos del archipiélago canario, en barco o avión. Todos pasean ataviados con la ropa de los Indianos, por las calles peatonales de la ciudad. Desde primera hora de la mañana del lunes de carnaval (este año el 12-02-0218) van calentando el ambiente con su alegría y bailando al son de la música cubana. Hasta las 13:30 , hora en que llega el personaje más emblemático de la fiesta de Los Indianos: la Negra Tomasa. Van a buscarla al muelle, justo dos calles más abajo. La Negra Tomasa es un personaje muy entrañable y simbol
Preciosa foto. Gran verdad la de Marco Aurelio.
ResponderEliminarAbrazote
Con la foto sentí un flechazo al verla.
EliminarY al primer impacto me susurró: Dulzura.
Luego vino la frase.
Me alegro que te gustase, tocaya.
Un beso!
Madrecita mía,
ResponderEliminarmadrecita tierna,
déjame decirte
dulzuras extremas.
Es tuyo mi cuerpo
que juntaste en ramo;
deja revolverlo
sobre tu regazo.
Juega tú a ser hoja
y yo a ser rocío:
y en tus brazos locos
tenme suspendido.
Madrecita mía,
todito mi mundo,
déjame decirte
los cariños sumos.
Poema de Gabriela Mistral
Un beso
Bonita poema, Jubi.
Eliminar¿Hay algo con más dulzura que una madre? Lo dudo.
Gracias por tu aportación.
Un besote.
Pues una foto así es el vivo retrato de la dulzura.
Es cierto que nadie puede resistirse a la dulzura. Añadiría, la dulzura siempre es sincera. El intento de fingirla siempre suele resultar una falsedad que incomoda a quien la recibe.
un beso
· LMA · & · CR ·
Hola Ñoco.
Eliminar¿Verdad que si? Es lo que me transmitió al verla, mucha dulzura.
Pues has dicho algo muy acertado e interesante que me hizo pensar. Ciertamente no imagino a alguien fingiendo dulzura porque se notaría a lo lejos esa falsedad como bien dices.
Todas las falsedades ajenas que uno siente son incómodas pero se me antoja que en este campo de la dulzura, sería más incómoda aún si cabe.
Gracias por tu comentario.
Un beso!
El problema con la dulzura es que para ganar la guerra ha de estar dispuesta a perder muchas batallas.
ResponderEliminarHola Tawaki.
EliminarTu comentario me dejó pensando......dando vueltas a esa particular percepción de la dulzura.
Y no sé si estoy realmente de acuerdo, o si logré entenderlo en toda su amplitud.
La dulzura debe perder batallas para ganar la guerra? ¿La dulzura o las circunstancias?
La dulzura es innata en algunas personas, sean las circunstancias que sean.
Mmmm sigo pensando y me voy pensando, sí.
Muchas gracias por tu comentario.
Un beso.