Hombre caído.
Después de dos lecturas infructuosas (que no abandonos absolutos, pues volveré a ellos en otra ocasión, cuando sea el momento adecuado), llegué hasta este libro que he terminado de leerme. Me gusta el género de los cuentos, y me gusta este autor (salvo algún libro puntual que no me gustó), así que enseguida supe que quería leer esta nueva obra recién publicada. Y con ese entusiasmo me adentré en su lectura, donde pude disfrutar de unos cuentos muy variados. Por un lado me atrajo mucho que no fuera monotemático, fue sencillo abandonar uno y empezar el siguiente. En ese sentido la lectura es muy inteligente ya que te lleva de un lado a otro, sin que pierdas el interés entre un cuento y el siguiente. Son cuentos relativamente cortos, por lo que la lectura de este libro es muy ágil y amena. Sin embargo, no en todos sentí ese sello personal del autor, y en algunos no hallé ese humor del que habla la sinopsis. A pesar de todo ello, la lectura se decanta -claramente- hacia el lado...
No hace falta que sea Ovidio el que diga algo que creo sabemos todos y es que no hay nada más que ver las magníficas cuevas subterráneas en todo el mundo para comprender en este caso la formación de estalactitas y estalagmitas, también son las gotas de agua las que a través de los siglos forman esas majestuosas catedrales subterráneas.
ResponderEliminarUn beso
Pues si, son auténticas obras de arte eh?
EliminarLa maravilla de la naturaleza.
Me has hecho recordar un lugar precioso que conozco.
Besos, Jubi.
Así es...y admira que algo tan frágil pueda hacer tal maravilla.
ResponderEliminarMe encantan esas gotas que, por su constancia, llenan de amor el corazón...
Millones de besos, mi dulce amiga. Te quiero.
PD: Neli, la fibro que me ha tenido apartada :-)
A mi también me parece admirable, Lucía.
EliminarY lo tomo como ejemplo. La constancia, aunque nos cueste y no veamos resultados, pero la misma constancia.....obran milagros ¿no crees?
Y sin lugar a dudas, una de los regalos más maravillosos que nos trae, es la manera en que llena el corazón de amor.
A mi también me encanta.
Se te echaba muuuucho de menos.
Me alegra que estés mejor. Constante gotas para ti, que limen y barran la fibro, ella es la que debería estar apartada, no tú :-)
Besosssss grandessssss. (Gracias!!!!)
ovidio tiene más razón que un santo. lo chungo es cuando viene las sequías! :)
ResponderEliminarUyy eso sí es chungo.
EliminarY entonces recordamos eso de que después de la noche viene la mañana. O que después de la lluvia sale el sol.
Y pensamos que habrá que recuperar la constancia después de la sequía, porque vendrán gotas, eso seguro!!!!!! :-)
Besos, Raúl.
En realidad son muchas gotas trabajando en equipo, con un objetivo común.
ResponderEliminarMuchas gotas, en equipo o en solitario, pero siempre la constancia.
EliminarAunque el resultado no lo veas hoy, ni mañana, ni pasado.......
Gracias por venir, Tawaki.
Un beso.