Los indianos
Un año más, la fiesta de Los Indianos, vuelve a ser el plato fuerte del carnaval de la isla de La Palma.
Y un año más me reafirmo en que no me gustan los carnavales, salvo Los Indianos en La Palma.
Y es que aquello es otro mundo festivo, más alegre, menos chabacano, más distendido, y muuucho más bonito y divertido. Bajo mi punto de vista, claro. Cuestión de gustos...
Es todo un reclamo para las miles de personas que viajan desde todos los puntos del archipiélago canario, en barco o avión.
Todos pasean ataviados con la ropa de los Indianos, por las calles peatonales de la ciudad.
Desde primera hora de la mañana del lunes de carnaval (este año el 12-02-0218) van calentando el ambiente con su alegría y bailando al son de la música cubana.
Hasta las 13:30 , hora en que llega el personaje más emblemático de la fiesta de Los Indianos: la Negra Tomasa.
Van a buscarla al muelle, justo dos calles más abajo.
La Negra Tomasa es un personaje muy entrañable y simboliza a los criados afroamericanos que traían consigo los emigrantes retornados de las tierras antillanas.
Minutos antes, el alcalde de la capital y el cónsul general de Cuba en el Archipiélago, descubren la placa que bautiza por un día a la Plaza de España como Plaza de La Habana.
La fiesta se reanuda por la tarde en la plaza de la Constitución con el reparto de los polvos de talco.
El ayuntamiento distribuye gratuitamente 5.000 botes de polvos de talco que forman parte de la tradicional batalla de polvos que cubre toda la ciudad de un gran manto blanco, y que hacen que sea el momento más apoteósico de la fiesta.
De ahí en adelante y hasta las primeras horas del día siguiente, todo es polvo, música cubana y alegría desbordante por todos los rincones de la ciudad palmera, como forma de rendir homenaje a esos retornados desde Cuba que emigraron en busca de fortuna.
Luego la gente se recoge en sus casas mientras aún resuenan los ecos de la fiesta grande en la mente de todos ellos.
Es entonces cuando los operarios comienzan a limpiar las calles en un ejercicio de vuelta a la normalidad, al día a día en sus maravillosas calles y en su preciosa ciudad.
Soy una enamorada de la isla de La Palma y creo que no hay nada en ella que no me guste.
Y un año más me reafirmo en que no me gustan los carnavales, salvo Los Indianos en La Palma.
Y es que aquello es otro mundo festivo, más alegre, menos chabacano, más distendido, y muuucho más bonito y divertido. Bajo mi punto de vista, claro. Cuestión de gustos...
Es todo un reclamo para las miles de personas que viajan desde todos los puntos del archipiélago canario, en barco o avión.
Todos pasean ataviados con la ropa de los Indianos, por las calles peatonales de la ciudad.
Desde primera hora de la mañana del lunes de carnaval (este año el 12-02-0218) van calentando el ambiente con su alegría y bailando al son de la música cubana.
Hasta las 13:30 , hora en que llega el personaje más emblemático de la fiesta de Los Indianos: la Negra Tomasa.
Van a buscarla al muelle, justo dos calles más abajo.
La Negra Tomasa es un personaje muy entrañable y simboliza a los criados afroamericanos que traían consigo los emigrantes retornados de las tierras antillanas.
Minutos antes, el alcalde de la capital y el cónsul general de Cuba en el Archipiélago, descubren la placa que bautiza por un día a la Plaza de España como Plaza de La Habana.
La fiesta se reanuda por la tarde en la plaza de la Constitución con el reparto de los polvos de talco.
El ayuntamiento distribuye gratuitamente 5.000 botes de polvos de talco que forman parte de la tradicional batalla de polvos que cubre toda la ciudad de un gran manto blanco, y que hacen que sea el momento más apoteósico de la fiesta.
De ahí en adelante y hasta las primeras horas del día siguiente, todo es polvo, música cubana y alegría desbordante por todos los rincones de la ciudad palmera, como forma de rendir homenaje a esos retornados desde Cuba que emigraron en busca de fortuna.
Luego la gente se recoge en sus casas mientras aún resuenan los ecos de la fiesta grande en la mente de todos ellos.
Es entonces cuando los operarios comienzan a limpiar las calles en un ejercicio de vuelta a la normalidad, al día a día en sus maravillosas calles y en su preciosa ciudad.
Soy una enamorada de la isla de La Palma y creo que no hay nada en ella que no me guste.
Nunca había oído hablar de este carnaval. Por aquí hace muchos muchos años que pasan sin pena ni gloria. Solo los niños y las niñas, salen a la calle a mojarse y a jugar con espuma.
ResponderEliminarEn cambio, en La Rioja, se festeja la chaya (carnaval) y se tiran harina, albahaca y agua.
Pregunta: ¿todos se visten de blanco y sombrero? ¿o solo es un grupo?
Abrazote
Hola, tocaya.
EliminarPor aquí sí pasan con mucha gloria. A la gente le encanta salir a la calle para vivir el carnaval. Niños y grandes.
Aunque en mi isla (Gran Canaria) poco tienen que ver con los carnavales de cuando yo era pequeña, que sí nos esmerábamos en conseguir el disfraz, poníamos cuidado en los detalles y nos divertíamos de una manera más sana y natural. Sin malos rollos y sin tonterías.
Ahora han cambiado muchas cosas, se entra en la vulgaridad (en el disfraz pero sobre todo en la manera en que se divierten) confunden libertad con libertinaje, faltas de respeto, chabacanería, etc...
Por eso ya no me gustan desde hace tiempo, y cada año me reafirmo en ello.
Respondiendo a tu pregunta: En la isla de La Palma el carnaval se vive de otra manera. Se disfrazan de lo que quieran, y por cierto son disfraces bonitos y cuidados con buen gusto. Es otro sentido y significado del carnaval.
Y por un día, que coincide siempre con el LUNES de carnaval, se celebra la fiesta de los Indianos. Y ese día sí que absolutamente TODOS salen a la calle ataviados de Indianos de aquella época.
Ellos con colores blancos o beige y sombrero. Ellas con los mismos tonos y sombrero o sombrilla.
A veces algunos portan una maleta de viaje también, de aquellas antiguas de la época. Una manera más de simbolizar el sentido de la fiesta de Los Indianos.
Los trajes como has visto en las fotos son muy elegantes y la fiesta es muy divertida , hay buen ambiente y la gente se nota que quiere pasarlo bien sin molestar a nadie. Compartiendo el sentido de la fiesta con alegría, buena compañía, con música, bebiendo, bailando, divirtiéndose...
Gracias por tu comentario.
Abrazote!
·.
ResponderEliminarNo conocía ese carnaval y visto lo visto, tus fotografías, me parece mucho más elegante que los carnavales que se extienden por todo nuestro país.
Me encantan tus explicaciones, las que confirman la elegancia y buen gusto de las fotos.
Un beso
· LMA · & · CR ·
Hola Alfonso.
EliminarGracias por tus palabras, me alegra que te gusten mis explicaciones.
A mi también me resultan muy bonitos y elegantes. Pero sobre todo rezuma buena onda en forma de alegría y saber pasarlo bien de manera civilizada.
Gracias por venir.
Un beso!
Qué carnaval tan señorial; incluso los polvos de talco le dan un toque de distinción. Y esas fotos que traen lo añejo, ese pasado de emigrantes que regresaban de hacer las Américas...
ResponderEliminarNada que ver este festejo con el otro carnaval canario, como bien dices. Son dos estilos divergentes que dan su impronta a las tierras que los acogen.
¿Verdad que sí?
EliminarIncluso los polvos de talco le dan esa guinda al pastel perfecto.
Una mirada..... Esas fotos y esa vestimenta de Indiano, traen el sabor añejo como bien dices, te transportan a una época y le dan todo un significado al lunes de carnaval.
A mi me resulta una bonita y elegante manera de no dejar caer en el olvido a esos emigrantes que venían de hacer las Américas. Y una excusa perfecta para disfrutar de un festejo inolvidable.
Sin duda, tú lo has dicho, NADA que ver con el otro carnaval Canario.
Estos carnavales Palmeros han sabido envejecer, los otros no y dejan mucho que desear....
Gracias por tu comentario.
Un beso.
Preciosa fiesta y excelentes fotos, al principio pensaba que las fotos eran tuyas, pero me temo que no es así. Pese a todo me has dado una perfecta idea del carnaval indiano.
ResponderEliminar«Pa’ La Habana me voy, madre,
aunque venga sin dinero,
pa’ que digan las muchachas:
—¡Ahí viene el indiano nuevo!».
Anónimo
Besos
Hola Jubi.
EliminarMe alegro de que te gustase y que opines igual que yo. Porque las fotos que elegí creo que transmiten la esencia de lo que a mi me parece el carnaval de Los Indianos.
Y lo mucho que me gustan la elegancia de vestidos en ellas y los trajes en ellos.
No, las fotos no son mías. Estas son muchísimo mejores :-)
"Al carnaval Palmero me voy, donde mejor se puede gozar.
Viene la conga que nadie la desalme,
guantanameras, guajiros orientales.
Son los indianos que llegan a La Palma
embajadores, blancos y universales."
(letra de una canción- La conga de la negra Tomasa-)
Gracias por tu comentario!
Besos.
Es que este carnaval no tiene nada que ver con el de las chirigotas, donde a veces se confunde el humor y la "libertad de expresión" con la vulgaridad y el insulto.
ResponderEliminarEste sí que merece mucho la pena. Las fotos son preciosas y uno sólo puede sorprenderse de cómo respiran entre tanta nube de talco. Precioso, muy cuidada la indumentaria y la ambientación. Así da gusto.
Hola Tawaki.
EliminarAsí es. Las chirigotas, que aquí se llaman "murgas".
Y los pasacalles, las carrozas, etc, etc....
Es el ambiente en sí de todas esas cosas, lo que cambia el sentido del carnaval. Y entre otras cosas, las diferencias con Los Indianos de La Palma.
En la respiración apenas lo notas, son polvitos muy pequeños en suspensión y pronto caen al suelo por el efecto de la gravedad, o encima tuyo (desde la cabeza hasta los pies).
Me alegra que te haya gustado y que lo veas como yo.
Gracias por tu comentario.
Un beso.