PENSAR


A veces no estamos todo lo bien que pudiéramos estar, porque le damos una importancia exagerada a lo que nos afecta el entorno.
Claro que afecta, pero no debemos olvidar que ante eso, la fuerza mayor la tenemos nosotros.
La causa-efecto, no varía. Estamos en una posición de la vida donde poca variación experimentará nuestra forma de ser, actuar y pensar.
Y es en este último verbo, donde radica algo realmente importante, que depende de nosotros la relatividad que cada cosa pueda poseer. Como no pensar con tanta insistencia en aquello que nos minora como personas y sí hacerlo en las otras que nos ayudan a avanzar feliz y tranquilamente.
Sin olvidar que necesitamos de los demás, pero confiando más y mejor en uno mismo.
Pensar qué me dijo, qué no me dijo, qué hizo o qué no me hizo, etc....
Nos asombraríamos de nuestra capacidad para cambiar qué elementos nos afecta y cuáles no, cuando vemos que la solución ideal y de satisfacción pasa principalmente por uno mismo.

Comentarios

  1. Añado unos matices:

    He aprendido (a base de golpes, claro) que nuestra actitud ante la vida es solo cuestion de VOLUNTAD, de decidir cómo queremos vivir la vida. Vivir positivamente la vida es una cuestión de elección. La vida siempre nos da y nos quita, nos acaricia y nos golpea, pero somos nosotros los que decidimos cómo nos lo tomamos.

    Igualmente, somos nosotros quienes decidimos qué es lo que queremos ser, lo que queremos vivir, lo que queremos pensar y hasta las emociones que queremos sentir más intensamente (o, por el contrario, dejar pasar).

    "Elegir" es, realmente, "elegir yo", arriesgarme a equivocarme, tener que reconocer posibles errores cuando los cometemos, tener que pedir disculpas cuando hacemos daños y reconocer que somos vulnerables y estamos expuestos al error, a la crítica y al dolor. Hace falta mucho coraje y mucha seguridad en uno mismo para afrontar todo eso y hacerlo con naturalidad. Conseguirlo es especialmente difícil, pero una vez conseguido la vida se hace especialmente sencilla y gratificante.

    Ese es el secreto de la vida (al menos, mi secreto), y aquí te le dejo, en tu blog.

    Por cierto, tus posts me hacen pensar y me incitan a la respuesta... :)

    Todo mi cariño.

    ResponderEliminar
  2. incluso no pensar, en absoluto, nos ayuda a dar pasos más firmes, caminar por sendas por las que nunca nos hubiéramos atrevido a poner un pie.

    ResponderEliminar
  3. Hola Emilio.
    Gracias por tus matices, siempre aprendo mucho contigo y me da la sensación de que podría estar horas escuchándote (leyéndote).
    Todo muy interesante y me dan ganas de comentar más, pero entonces esto se convertiría en un diálogo a lo público. jaja.

    ¡¡¡Que no nos falte nunca ni el coraje ni la seguridad!!!
    Tus palabras me hacen pensar a mi también.
    Gracias una vez más.
    Besos.
    Neli.

    ResponderEliminar
  4. Hola Raúl!!!!!!!
    ¿Cómo han ido esas vacaciones?
    Feliz de tu regreso.

    Me gustó tu comentario, ya hablaba yo de pensar........o pensar menos..........o como tú apuntas, no pensar.
    Interesante.

    ¡Gracias!
    Un beso.
    Neli.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Querido Miguel.

Los indianos

La particular memoria de Rosa Masur.