Querido Miguel.
He terminado de leerme la novela "Querido Miguel", de Natalia Ginzburg, y me ha encantado. Me siento feliz y afortunada de haber llegado hasta ella. Es un libro intimista, que al estar narrado de manera epistolar se convierte en más humano si cabe. Entrar en este libro es acariciar el alma de las personas que en él habitan. Es sumergirse en su mente, en su sentir. Es constatar en primera persona cómo respiran y cómo laten sus corazones. Me resulta increíble cómo la autora logra, de manera tan sublime, ahondar en el interior de los personajes y todo aquello que les rodea. La manera de mostrarnos ese mundo interior es tierna, amorosa, sincera, directa, sublime, transparente, clara, amable, atractiva, pero sobre todo muy cálida y hasta reconfortante. Existe una especie de catarsis en esta historia, donde las ausencias físicas se solapan a las emocionales, y donde hay cabida tanto para las letras infinitas como para los silencios más huecos. Me ha parecido una novela muy respet
Fantástica cita. Muy apropiada para fomentar un liderazgo, por ejemplo... o simplemente, una aceptación de uno mismo y sus posibilidades.
Tus pinares me recuerdan a los de Tamadaba
Un beso
· LMA · & · CR ·
Hola Ñoco.
EliminarMe gusta más como aceptación de uno mismo y sus posibilidades y capacidades.
Sí se parece al pinar de Tamadaba, cierto. Pero la foto la hice la semana pasada (de vacaciones) en la isla de La Palma, es la parte alta de La Caldera de Taburiente. Un lugar precioso.
Un beso y gracias!!
Poca capacidad de convicción tiene quien no cree en sí mismo; por eso los que son autocríticos son tan malos vendedores.
ResponderEliminarHola Tawaki.
EliminarCuánta razón, ¿verdad? Si no crees en ti, difícilmente otros lo harán.
Me dejaste pensando con eso de los autocríticos.....no sé, no lo había pensado ni oído nunca así.
Gracias por venir.
Un beso.